Pruebas y más pruebas ¿cómo lo llevo?

1 de mayo del 2016

Al volver de mi retiro de marzo y comenzar de nuevo con el montón de visitas al clínico, el hecho que la enfermedad se haga más presente, crea bastante ansiedad. No dejo de tener ese nudo en la garganta que me incomoda bastante. Hay momentos que siento como me falta el aire y me entra una sensación de intranquilidad corporal que no me gusta nada. Estoy asustada y por mucho que quiera racionalizar y pensar que todo va bien, mi cuerpo se contrae y se queja de esa carga emocional que aún tengo pendiente de expulsar. Ahí sigue la pena, ahí sigue cierto enfado que lo voy cubriendo de amor pero que necesita expresarse y que sale mediante algún dolor físico. Me duele todo el lado derecho. Lumbares, omóplato, hombro y pecho. No quiero tomar nada. No me apetece envenenar más mi organismo con medicamentos. Soy consciente que debido a la quimioterapia mi cuerpo está dolorido y estas sensaciones aunque irán remitiendo, me acompañarán un tiempecillo. 
Ahora mismo, tengo miedo de volver a "traicionarme" y sumergirme en esa dinámica rápida y veloz del día a día que no te deja ver nada. Me gusta la sensación de paz, de lentitud que he podido sentir. El disponer de tiempo para uno mismo es algo maravilloso y quiero tenerlo siempre presente. Disfruto de mi soledad. Necesito estar sola para expresarme, para crear, para no hacer nada y que nadie espere nada de mí. Esa sensación de ser dueña de cada minuto me encanta pues es cuando consigo conectarme conmigo misma. Sola, en soledad buscada. Un placer retomado. 
La planificación actual es la siguiente. El pasado jueves 28 de abril asistí a la visita con mi cirujano y me miro la cicatriz para confirmar que tengo una pequeña hernia en la parte más alta y que con el tiempo tendrá que ser operada. Eso me supone no poder hacer ejercicios de abdominales clásicos y por ese motivo voy a probar con los hipopresivos, a ver que tal. Igualmente, tengo que tener prudencia con hacer cosas demasiado intensas pues la tendencia será a que se haga más grande. En relación, sus indicaciones fueron que en el caso de sentir un dolor fuerte en esa zona, como de apendicitis, que vaya corriendo de urgencias, pues tendría que ser operada. Bueno, esperemos que no pase nada de lo descrito. Pero pienso insistir en operarme lo antes posible. Por otro lado, me dio los resultados de las resonancias en sacro y lumbares, no hay nada de importancia pero por lo visto es normal que tenga dolor, pues hay alguna patología debido a desgaste en vertebras y algo de inflamación en la zona del iliaco. Otra cosita para seguir mirando, hala, al traumatólogo. 
A las 15.40 tenía el Tac. Así que me pincharon el porth-a-cath, me dieron un contraste bebible con sabor anís, más malo que no veas... y al poco estaba dentro del aparato sintiendo el calorcito del contrate pinchado, 3 minutos de respira y no respires y fuera. 
Mañana, tengo la densiometría ósea y la analítica. Llevo dos días sin tomar complementación (vitaminas, glutamina y probiótico) para que no salgan alterados los marcadores. A confiar que todo salga bien. 
El 20 de mayo tengo la visita con mi oncóloga, ese día será muy importante. Deseo que todo vaya bien y que una vez confirmado, mi estado de ansiedad disminuya pues lo estoy pasando mal y me preocupa. Quiero aceptar que es normal que me sienta así; nerviosa, con miedo, aunque realmente, a veces cuesta, mucho. 

Comentarios

Publicaciones más vistas

ENTREVISTA Una historia de vida: Chus, una gallega con muchas ganas de vivir

ENTREVISTA: Una historia de vida. Susana Lozano, una luchadora sin tregua

ENTREVISTA Una historia de vida: Vanessa Fornieles, la alegría de la superación