Diagnóstico e histerectomía
Los susurros del miedo Existe una tendencia a justificar los acontecimientos como si vinieran dados desde fuera, como si las cosas que nos pasan sean un castigo por parte de algo divino, de la mala suerte, del destino, etc. situándonos en una postura victimista donde parece que poco podemos hacer al respecto, volcando en manos de otras personas nuestro futuro, nuestra vida. Por suerte, nunca había tenido que tratar algún tema de salud grave con las eminencias en medicina. Seguía mi código de valores y esperaba cierto apoyo, ciertas palabras de confort que me ayudaran a poder encajar las nuevas noticias. Pero lo cierto es que, cuando me reuní con mi doctor de referencia, parecía más que me hablase de algo estadístico que de una persona enferma. Todo eran probabilidades y posibles acciones a la ecuación resultante. En ese momento no necesitaba sólo eso, igual acompañando el mensaje con una mirada de cariño o de ternura me hubiera bastado para confiar en él y no desmoronarme. Al de